Tabla de contenidos

⍟ ¿Tengo un color favorito?

11/08/2025

El otro día me hicieron la pregunta más inocua e universal que se le puede hacer a una persona: ”¿cuál es tu color favorito?”. Y, ante el desconcierto general, tengo que reconocer que no pude responder a esa pregunta. Porque estoy pensando que en realidad creo que no tengo un color favorito.

En cuanto a mi armario y al tipo de ropa que compro suelo gravitar en torno al azul oscuro. O, mejor dicho, solía gravitar en torno al azul oscuro porque si repaso las últimas prendas que he comprado, encuentro desde el naranja butano al verde militar, pasando por el rosa chicle. Por lo que no creo que ninguno de estos colores creo que sea favorito como tal.

Otro ejemplo. Hace poco cambié el color del blog por uno que estos días me llama más. Este verano es mi verano del color “piel de melocotón”. Y en otoño a lo mejor vuelvo al marrón, como aquella vez que me dio por comprar tinta marrón para la estilográfica. Igual que me dio por escribir en gris. O en violeta. Sé que son fases porque ahí tengo los botes de tinta y un par de cajas de cartuchos a medio gastar. No me importa, ya rellenaré alguna estilográfica.

En casa, además, tengo bombillas de colores en algunas habitaciones y suelo usar escenas, incluso algunas con animaciones, para cuadrar con mi estado de ánimo actual o con la actividad que estoy llevando a cabo en ese momento. Es algo que me gusta hacer y con lo que me encuentro a gusto. Aunque esto tiene poco que ver con mi color preferido o no, sino más bien sencillamente con el momento del día y mis necesidades lumínicas en cada momento.

Estos días tener color en mi vida me resulta muy importante y no termino de saber por qué. Solo sé que tener colores variados a mi alrededor me alegra y me hace sentir bien.

El caso, que me voy por las ramas, es que hace años podía decir con más o menos confianza que mi color preferido era un verde que con el paso de los años fue azulándose, pero hoy no solo me veo incapaz de elegir un color sobre todos los demás: es que creo que me niego a hacerlo. Y no me importa.

Vemos demasiados colores con nuestros ojos como para limitar nuestras elecciones. Y lo que ahora es melocotón oscuro en dos meses a lo mejor es marrón cobre, en cinco a lo mejor es verde menta y el año que viene se convierte en púrpura.

Posts relacionados

Lo he enviado al IndieWeb Carnival de este mes, de Marisabel. Más información en su precioso sitio Web.

Foto de Christina Rumpf en Unsplash

Posts relacionados